Para ayudar a tus hijos a evitar el bullying, en primer lugar considera escuchar a tus hijos ya que los menores necesitan hablar sobre cómo se sienten. Si tienes el privilegio de que tu primogénito confíe en ti, no debes interrumpirlo cuando está relatando lo que le sucede. Concédele tu completa atención.
¿Cómo le favorece esto? Le brinda la seguridad requerida para hablar y solicitar ayuda. La víctima puede ser el mayor cómplice del bullying, debido a su incapacidad de denunciar. La idea es que exista una comunicación directa para que el menor acuda a ti cuando se sienta angustiado.
Si bien es correcto que estés siempre disponible para que tu hijo te escuche cuando lo requiera, si no le entregas su espacio para comenzar a resolver sus propios inconvenientes, crearás una situación idónea para que sufra maltrato.
Por ende, es de suma importancia instruirlo desde pequeño para que encuentre alternativas y tácticas para controlar los desafíos. Por ejemplo, cuando le envías la colación al ingresar a la educación preescolar, asegúrate de que sepa abrir los envases por sí mismo. Asimismo, al estar en un lugar público y él desee algo, dile que lo pida sin tu intervención.
Todas las acciones que realices para robustecer la independencia de tu hijo contribuirá a que sea fuerte al exterior del hogar. Un niño que sepa manejar solo las situaciones y exija respeto, jamás será víctima de bullying.
En contraste, un infante que no es capaz de hacer nada por sí solo y tiene actitudes de bebé, será objeto de burlas de todos los niños que abusen de su poder, ya que será un blanco fácil indefenso.
Cree en tu hijo, aunque cometa equivocaciones:
Ser padre y madre no necesariamente tiene como meta criar un hijo perfecto. Lo importante es saber educarlos, tomando los riesgos necesarios y no rendirse cuando alguna situación no resulta como se tenía prevista.
Considera las oportunidades que le das para hacer las cosas bien. Si le encomiendas alguna labor, no intervengas al primer error para arreglar todo. Al hacer esto, le estás enviando señales de que piensas que no puede realizar bien sus tareas. Lo importante es lo intente hasta que le resulte de forma correcta, así el niño no tendrá miedo de no ser perfecto, y no será un objetivo fácil del bullying ¿Por qué? Porque no le importará que los demás critiquen los proyectos que lleve a cabo.
Por otra parte, un menor que se acostumbre a ser perseverante hasta conseguir sus metas, exhibe un carácter de inmunidad frente a las burlas y los insultos. El niño se enfoca en sus labores, sabiendo que conseguirá lo que desea.
Debido a estos motivos, dale a tu hijo el tiempo que necesita, fomenta su independencia y apóyalo para que sea una persona persistente. Así, adquirirá una seguridad personal y tranquilidad.